miércoles, 25 de enero de 2012

El Héroe de la Copa


A veces renuncio a la idea de que en el fútbol haya sorpresas. Por eso, aunque casi siempre gane el que se supone que debe hacerlo, cuando no lo hace la emoción es mayor.

Ayer viví a través de la televisión uno de los partidos que mejor sabor de boca me han dejado. Lo cierto es que no soy una aficionada acérrima de ningún equipo, pero la pasada noche sentí esa emoción, esa necesidad de empujar a unos jugadores que son fuertes gracias a su afición.

Además de hacer historia y convertirse en el primer semifinalista de la Copa del Rey, el Mirandés consiguió conquistar los corazones de muchos aficionados al fútbol. Porque aunque sean un equipo modesto, que no pequeño, de Segunda B demostraron que con esfuerzo y calidad humana se puede conseguir hasta lo imposible.

Hoy todos, o la gran mayoría, nos sentimos del Mirandés. Un equipo grande entre los grandes!

jueves, 19 de enero de 2012

Unión y compromiso

La lucha, el sacrificio, el compromiso y el sentimiento de creerse fuertes hacen a un equipo grande. Parecen palabras sencillas en la boca de otro, pero la realidad es que están cargadas de un peso excesivo que a veces propicia y desencadena un final incierto.

Los momentos buenos son para disfrutar y soñar, pero con la certeza de haber aprendido la lección. No es fácil ganar y lo es menos asimilar la victoria. Lo importante es comprender que no siempre se gana y muchas veces se pierde cuando menos se merece.

De los momentos difíciles es necesario sacar provecho e intentar aprender que la suerte no siempre viene de cara. La actitud en la mayoría de los casos es más importante que la propia calidad, sea individual o grupal. Y ese esfuerzo que se debe representar no solo en el campo, sino también en las gradas, tiene que ser la clave para que el As Pontes recupere la serenidad y se crea de nuevo que merece permanecer un año más, y los que vengan, en Tercera.

Tras el empate ante el Racing de Ferrol que, personalmente supo a victoria, el As Pontes deberá seguir su camino en esta difícil liga que se prevé dura. El siguiente escollo será el Vilalbés, un más que digno rival que la pasada temporada peleó por lo puestos de ascenso y que está actualmente situado en la cuarta plaza.

No será fácil. Nada lo es. Por eso creo que es necesario depositar la confianza suficiente en nuestros jugadores y cuerpo técnico como la base de esa esencia que se precisa para alcanzar la consecución del objetivo final.

sábado, 14 de enero de 2012

Ser Cristiano Ronaldo


Un día cualquiera, pensando en la difícil situación en la que nos encontramos la mayoría de los jóvenes de hoy en día para encontrar un trabajo que nos dignifique o sencillamente independizarnos, se me pasó por la mente una idea un tanto surrealista.

Siempre he pensando que existe una dificultad añadida a la hora de hacerse un hueco en el mundo, sea en el ámbito que sea. Es complejo destacar y más si las cualidades con las que cuentas no son llamativas o simplemente se asemejan a las de cualquier mortal. Por eso, decidí darle la vuelta a mi planteamiento y meditar sobre lo duro que debe ser un personaje destacado del entorno deportivo.

No debe ser fácil, por ejemplo, ser Cristiano Ronaldo. Aunque la frase que encabeza este blog invita a pensar que soy exageradamente crítica con este futbolista, entiendo que muchas de sus actuaciones estén ligadas exclusivamente a un perfil que se ha hecho de él y que probablemente difiera bastante de la realidad.

Cristiano Ronaldo es el jugador más caro de la historia y eso implica que pase de ser un simple mortal a tener la obligación de actuar con la máxima perfección, al menos, en el terreno de juego. Por eso, en esta idea surrealista y transitoria que me invade defiendo que sus actuaciones y sus deliberadas declaraciones considerándose el más rico, el más guapo y el mejor jugador, no son más que un sello de identidad que ni él mismo se cree.

Probablemente, la decisión de no celebrar su último gol en el Bernabeu ante el Granada, no es más que una reprimenda a sí mismo. Desde el partido contra el Barcelona, Cristiano se ha ido haciendo cada vez más pequeño y las críticas cada vez más grandes. No es fácil ser siempre el mejor y lo que es todavía más complejo es responder en cada ocasión a las expectativas que se esperan de uno mismo. A veces, o más bien ahora, me compadezco de él.

Utilizando de nuevo la frase de cabecera, creo que si Cristiano Ronaldo es el símbolo de la sociedad actual es que hay algo que realmente no funciona. Nadie puede ponerse en su piel y mucho menos desearlo.

Por mi parte seguiré buscando mi hueco y, aunque luchemos en la mayoría de los casos por alcanzar un lugar notorio en nuestro ámbito de trabajo, me decanto por perseguir el sueño de ser cada día un poco más yo y menos como me ven los demás.